¡A defender la Universidad!

Hoy los deseos de destrucción de nuestra Universidad se hacen más patentes cuando la Junta de Control Fiscal, en contubernio con el gobierno, se apresta a llegar a acuerdos sobre el plan de ajuste fiscal. Ese plan de ajuste fiscal nos condena a la miseria dejando en la indigencia a miles y miles de trabajadores e hipotecando el futuro de nuestros hijos y nietos. En dicho plan no existe un mecanismo económico de cómo habremos de salir de este atolladero, pero sí tiene todos los recortes que recibiremos, así como los aumentos en impuestos como el IVU, CRIM, etc., por los próximos 30 años. 

En cuanto a la Universidad, ese plan continúa atentando contra su existencia al no aceptar ninguna propuesta que pueda sacar a flote la Universidad. En cambio, insisten en seguir eliminando el presupuesto de la institución con la única intención de hacernos inservibles. 

Ante esto, la dirección universitaria se hace cómplice con esta cofradía cuando ni siquiera le plantea a la comunidad universitaria el problema y, mucho menos, hacer una lucha unitaria para la defensa de la UPR. 

Quienes vimos en la Dra. Olavarría la figura que pudiera enfrentar, junto a la comunidad universitaria, el ataque despiadado de la Junta de Control Fiscal y del gobierno a la Universidad nos desencantamos más rápido que ligero. El pensamiento y acción de unidad de propósitos que debiera tener la dirección universitaria se desvaneció tan pronto la Dra. Mayra Olavarría se sentó en la silla presidencial. Luchar por defender nuestra Universidad tiene que ser un escrito en piedra firmado por todos los sectores universitarios. Buscar excusas en papel mojado por parte de la presidenta para no querer otorgar un receso para ir a exigir la defensa del dinero que le corresponde a la Universidad, es abrazarse a la mayor indiferencia. La presidenta tiene un doble discurso, se va como llanera solitaria con sus inconsecuentes rectores a la Legislatura a señalar que 500 millones no son suficientes para operar la Universidad, lo cual es cierto, pero le da la espalda al resto de la comunidad para que hagan lo propio. A esta presidenta ya se la tragaron los enemigos de la Universidad como lo son Ubaldo Córdova, José Perdomo y Soniemi Rodríguez, que son quienes verdaderamente mandan en la UPR. 

Los sectores universitarios tenemos que despojamos de estos administradores que a lo único que aspiran es a su bienestar individual y, a los demás, que nos lleve el demonio. 

Todas y todos al Capitolio el lunes, 18 de octubre, a las 9:00 de la mañana, a defender la Universidad. 

¡Luchamos Para Vencer! 

Author: HEEND

La Hermandad de Empleados Exentos No Docentes (HEEND) es una organización bonafide de naturaleza sindical con fines no pecuniarios, no partidista, ni sectaria. Actualmente, representamos de manera exclusiva a alrededor de 3,500 trabajadores y trabajadoras de la Universidad de Puerto Rico. La unidad apropiada la constituyen empleados que ejercen labores no docentes, principalmente de labores de oficina.