Nota Editorial – A raíz de la conmemoración del Primero de Mayo se han realizado varias evaluaciones, algunas verbales y otras por escrito. Algunas individuales y otras colectivas, mientras que unas han sido públicas y otras muy privadas. Para continuar con esta necesaria evaluación – que nos debe llevar al aprendizaje y al desarrollo de nuevas alternativas – Rumbo Alterno abre sus páginas para compartir las evaluaciones recibidas.
Agradezco siempre al compa Erasto y a Quirós por tomarse el tiempo en reflexionar sobre las actividades y momentos históricos por los que pasa el movimiento obrero. Sin embargo, creo que los análisis que he leído hasta ahora se quedan cortos y solo se enfocan en un minúsculo y cada vez más reducido grupo de personas en PR y urge expandir y tomar en consideración otros elementos:
– Se menciona 2017 sin tomar en consideración el 8M2017, en PR y en el mundo, la huelga de la UPR y el movimiento de #BlackLivesMatter que ya tenía un gran auge y los movimientos ambientalistas. Todos estos importantísimos movimientos que no tienen por qué tener una relación directa con el sindicalismo pero que el sindicalismo debió apoyar de forma contundente y no lo hizo ni lo hace.
– Movimientos con capacidad de movilizar a cientos y miles sin estructuras como los sindicatos y con discursos que apelan más porque el sindicalismo, al igual que el marxismo (DESDE MI PUNTO DE VISTA) aunque tienen mucha vigencia no han sabido acomodarse al ahora y apelar a todo el mundo. Por eso, me parece que seguir trayendo evaluaciones solo desde lo que hacen los sindicatos deja fuera un montón de factores importantísimos.
– Los movimientos tienen sus peaks, van a ser cooptados, van a semi disolverse y a volver a reorganizarse . Esa discusión yo la he tenido en otras organizaciones políticas. Hay que saber que eso pasa y pensar en otras estrategias pa volver a coger fuerza o trabajar con lo que se cosechó.
– La lucha del movimiento obrero no puede medirse por una conmemoración anual. Es más, es injusto evaluar los movimientos sociales solo por las protestas e incluso las políticas públicas a nuestro favor o en contra. Tal vez si se estudiáramos otros movimientos, como los feminismos, nos daríamos cuenta de que a pesar de la embestida fundamentalista se está cambiando la conciencia de una gran parte de la sociedad. Por ejemplo, hace 15 años hubiese sido imposible pensar que el caso de Elianni Bello se ganara como se ganó.
Urge descolonizar nuestra forma de mirar, organizar, evaluar y construir nuestros espacios de lucha. Seguir invisibilizando, y sé que es sin darnos cuenta, otros movimientos que están cambiando la conciencia y estructuras, nos llevará a seguir cometiendo los mismo errores.
Tenemos una reunión pautada para hablar de nuestras (las de todes) actitudes patriarcales/racistas/coloniales y, por lo menos desde mi punto de vista, tal vez aprender de otros movimientos nos ayude a explorar otras formas de ver, evaluar y organizar nuestra lucha.