Un grupo de dirigentes compuesto de las juntas de directivas, delegados y presidentes de capítulos de la Unión Independiente Auténtica de Empleados de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (UIA) junto al presidente ejecutivo Luis de Jesús Rivera, se manifestaron desde horas de la madrugada del 28 de agosto frente al edificio central de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados en la Avenida Barbosa, y pintaron el pavimento con la consigna “UIA EXIGE RESPETO” en un color verde intenso. Esta acción concertada de propaganda se realizó para exigir respeto por parte de los ejecutivos de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados ante su negativa a negociar con la Unión.
Entre los asuntos que los lideres sindicalistas exigieron negociar se encuentran los siguientes:
1. Ajustes salariales que no discriminen contra los unionados de mayor antigüedad en la AAA.
2. Ajuste por costo de vida en los pagos por reembolso de dietas
3. Reconocimiento de una compensación mayor por trabajo realizado los días feriados
4. Control al aumento en el pago de deducibles cobrados por el plan médico
Como parte de la protesta la UIA expresó como la AAA le faltaba de respeto a los trabajadores al ofrecer un aumento de cincuenta centavos ($0.50) en el reembolso de dietas, mientras que la Junta de Gobierno recientemente se aumentó su compensación por servicios entre $3,250 y $6,500 anuales. Resulta escandaloso que por reunirse una vez al mes – a veces por Zoom – los miembros de la Junta de Gobierno cobren la friolera de entre $3,520.83 y $3,791.66 mensuales por concepto de servicios.
El mejor “part time” de Puerto Rico y posiblemente del mundo… todo por una reunión mensual.
Luego de terminada la manifestación frente al edificio central de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, los unionados se trasladaron al edificio central del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, donde procedieron a pintar la consigna “UIA EXIGE RESPETO” en el pavimento frente a la agencia. De igual manera exigieron la intervención de un mediador del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos para propiciar la negociación con la Unión.
El Secretario del Trabajo designó a la señora Madeline Meliá, mediadora de amplia experiencia para que realizara las gestiones de reunir a las partes. A raíz de dichas gestiones compareció al Departamento del Trabajo el equipo negociador de la AAA, compuesto por la Directora de Recursos Humanos y Relaciones Laborales de la Autoridad de Acueductos y Alcatarillados, la Lcda. Ainez Medina Resto y dos abogadas del bufete patronal Schuster Aguiló.
Al comenzar la negociación, las abogadas del bufete Schuster Aguilo plantearon que no interesaban la mediación del Departamento del Trabajo y que bajo ninguna circunstancia habrían de negociar con la Unión sino que meramente estaban en un proceso de “conversaciones”.
Luego de varias horas de mediación la AAA finalmente aceptó continuar la negociación con un mediador del Departamento del Trabajo. Para concretar el acuerdo se preparó a manuscrito una estipulación que resumía lo acordado. Sin embargo, justo antes de proceder a firmar el acuerdo, el equipo negociador de la AAA exigió de la UIA que borrara la consigna que se había pintado en el pavimento frente al edificio central de la Autoridad. La UIA se opuso a borrar la consigna. Ante la posición de la UIA, la AAA preguntó si la Unión tendría alguna objeción a que fuera la propia Autoridad la que borrara la consigna. La Unión manifestó que no se opondrían a que la AAA borrara las letras. Sin embargo, y luego de consultar con la plana mayor de la AAA, el comité negociador de la Autoridad cambió su posición, y volvió a exigir que fuera la UIA la que borrara las letras ya que, según ellas, la AAA no podía “cerrar la avenida” para realizar el trabajo.
La consigna de la controversia. La dignidad de los trabajadores no habrá de borrarse.
Nuevamente la Unión se opuso a lo exigido por la Autoridad. La consigna pintada en el pavimento es un acto de libre expresión, no contiene palabras soeces ni insultantes y de ninguna manera obstaculiza ni afecta las operaciones de la AAA. A pesar de lo expresado por la UIA, la AAA insistió en que fuera la Unión la que borrara las letras. Así las cosas, y luego de haber negociado una estipulación aceptable para ambas partes, la AAA se retractó de su palabra y se rehusó firmar el acuerdo.
Ante esta situación la UIA se reafirma en su exigencia de respeto y exige que la AAA se siente a negociar con la Unión aquellos asuntos que son de beneficio para los trabajadores. La posición patronal de rechazar sentarse a negociar como respuesta al legítimo ejercicio del derecho a la libre expresión resulta ser una práctica ilícita e indeseable.
Ante la intransigencia patronal, la UIA ha anunciado que habrá de realizar una serie de acciones concertadas durante las próximas semanas para obligar al patrono a sentarse a negociar con la Unión. Mediante el ejercicio del derecho a la libre expresión y a las acciones concertadas la UIA EXIGE RESPETO.
Foto de portada: la consigna de la controversia pintada en el pavimento frente al edificio del Departamento del Trabajo en Hato Rey.
