La Federación Sindical Mundial organiza otro año más un Día Internacional de Acción de los Sindicatos por la Paz el 1 de septiembre, fecha del oscuro aniversario del inicio de la Segunda Guerra Mundial tras el ataque de la Alemania nazi a Polonia. Este día es establecido por el movimiento sindical clasista internacional como el día del recuerdo y del honor para los millones de víctimas de las atrocidades nazis y fascistas de la Segunda Guerra Mundial, pero también para todas las víctimas de las guerras imperialistas, para todos aquellos que pagaron con su vida los antagonismos imperialistas y las especulaciones de las multinacionales y la bulimia del gran capital.
Hoy en día, el mundo se enfrenta a una fase de extrema intensificación del antagonismo político, económico y militar. Las fuerzas imperialistas, especialmente Estados Unidos, la OTAN y la Unión Europea, tienen como objetivo el control y la explotación de los recursos económicos de nuestro planeta, el fortalecimiento de sus esferas de influencia y el cambio de nuevas fronteras. Los antagonismos interimperialistas se agudizan constantemente, los conflictos armados se mantienen y se intensifican mientras que los peligros para la Paz Mundial son graves.
Los sindicatos combativos y clasistas de todo el mundo suman sus voces e intensifican su lucha contra la continuación de las intervenciones militares y las guerras, la militarización acelerada de las relaciones internacionales y el aumento vertiginoso de los gastos militares. La FSM exige el fin inmediato de todos los conflictos armados imperialistas, el fin de la guerra en Ucrania y el pleno respeto de la soberanía, la independencia y el derecho de todos los pueblos a elegir libremente su presente y su futuro así como el camino de su desarrollo económico y social.
Exigimos la disolución de la OTAN y de todas las coaliciones militares, la abolición completa de las armas nucleares y el respeto de la independencia y la soberanía de todos los Estados. Denunciamos las exclusiones, discriminaciones, embargos y sanciones impuestas por EE.UU., la OTAN y la UE contra diversos países, ya que repercuten negativamente en el nivel de vida de las familias de bajos ingresos, los trabajadores, los pequeños agricultores pobres y los estratos populares en general.
Además, el movimiento sindical internacional denuncia la decisión de la Cumbre de la OTAN de añadir nuevos Planes Regionales pero también de definir un límite mínimo del 2% del PIB en gastos militares, lo que agudiza la confrontación y profundiza los preparativos y el riesgo de un conflicto imperialista generalizado con consecuencias desastrosas para los estratos populares y la gente común que siempre paga el coste del antagonismo imperialista con la muerte, el refugio y el deterioro de sus condiciones de vida y de trabajo.
Además de las condiciones de alza generalizada de los precios, de inflación y de políticas de austeridad a largo plazo que han reducido todos los gastos relacionados con las necesidades populares y el nivel de vida de los trabajadores; En una época en la que todas las reivindicaciones de los trabajadores en materia de educación, salud, seguridad social y condiciones de vida dignas, son rechazadas por los gobiernos burgueses con el pretexto de la falta de recursos, etc., el nuevo aumento de los gastos militares es provocador, además de revelador de sus intenciones.
Estamos del lado de los pueblos que sufren en todo el mundo e intensificamos nuestras luchas contra las guerras imperialistas y sus causas profundas. La Federación Sindical Mundial llama a sus afiliados y amigos, a todos los sindicatos clasistas a organizar acciones y manifestaciones antibelicistas y antiimperialistas bajo el lema:
Más gastos para la salud, la educación y la seguridad social y no para las armas de la OTAN y las intervenciones imperialistas
El Secretariado